Un reguero de sangre sobre el asfalto de la avenida Yerbal Viejo, casi frente al edificio de la Seccional Quinta de Oberá, permanecía ayer como último testimonio de la agonía de Alexis Santa Cruz (24), asesinado de una puñalada, hecho por el que fue detenido el ex concubino de la pareja de la víctima.
El ataque ocurrió sobre calle 4 del barrio San Miguel, tras lo cual Santa Cruz caminó casi 200 metros en busca de ayuda, aunque murió antes de arribar a la citada dependencia.
Desde un primer momento testigos del hecho apuntaron a Richard D. S. (22), quien fue detenido la misma noche del miércoles en el barrio Oasis, a donde habría escapado luego de perpetrar el homicidio.
Si bien preventivamente el Juzgado de Instrucción Dos caratuló la causa como homicidio agravado, fuentes del caso anticiparon que podría derivar en femicidio vinculado, figura que se aplica para la muerte perpetrada por un asesino que busca castigar o destruir psíquicamente a una mujer.
Allegados a la víctima calificaron el caso como una “muerte anunciada”, ya que el sospechoso habría proferido varias amenazas previas.
El ahora detenido nunca habría aceptado la relación entre la víctima -quien había sido su mejor amigo- y su ex pareja, Verónica O., con la cual tuvo un hijo que actualmente tiene 3 años.
“Si le hago algo a Alexis, seguro que no me vas a dejar ver más al bebé”, habría anticipado el presunto homicida en un audio de WhatsApp enviado a su ex.
Precisamente, la agresión se registró el miércoles, alrededor de las 20.30, cuando Richard D. S. llegó a la casa donde vivía Santa Cruz para dejar a su pequeño, circunstancia que aprovechó para cometer el crimen.
En diálogo con El Territorio, familiares de Verónica O. comentaron detalles del hecho que conmocionó al barrio San Miguel. Atribuyeron el accionar del acusado a los “celos enfermizos” que tenía por la relación de su ex con el fallecido, como también por el trato y los cuidados que Santa Cruz le brindaba a su hijo.
Al mismo tiempo, citaron serios antecedentes de violencia de género por parte de Richard D. S. en perjuicio de quien había sido su pareja, al extremo que la mujer estaba embarazada de mellizos y perdió un bebé a raíz de una paliza.
Incluso, durante mucho tiempo el sospechoso tuvo prohibición de acercamiento hacia su ex, pero luego ella aceptó darle una nueva chance para que pueda revincularse con su hijo. Por ello, habitualmente el implicado buscaba al pequeño para pasar algunas horas juntos en su casa de calle 2 del barrio San Miguel.
Tampoco es un dato menor que el año pasado Richard D. S. lesionó con arma blanca a su propio hermano, hecho por el que fue denunciado y se labró una orden de captura que nunca se concretó, tal como reconoció un vocero del caso.
“Él (por el sospechoso) y mi hermana convivieron tres años, entre Buenos Aires y acá, y siempre fue violento con ella. Yo vi cuando una vez le puso un cuchillo en el cuello. Lo peor fue cuando estaba embaraza de mellizos, que le dio una paliza y perdió un bebé”, graficó una hermana de Verónica O.
Con relación al hecho, comentó que el miércoles por la tarde el sospechoso retiró a su hijo y lo llevó de regreso pasadas las 20, ocasión en la que comenzó a proferir amenazas.
“Entonces mi hermana llevó al bebé para adentro y Alexis salió a cerrar el portón, momento que el otro aprovechó para hincarle y salió corriendo”, detalló.
Herida mortal
La casa que Alexis Santa Cruz compartía con su pareja, sobre calle 4 de San Miguel, está situada frente a la vivienda de los padres de la mujer, por lo que varios de sus familiares fueron testigos del hecho. En tal sentido, varios de ellos prestaron declaración ayer en sede policial y no hicieron más que complicar la situación del principal sospechoso.
“El asesino le hincó y se escapó. Estaba de short y remera, pero se ve que fue a la casa y se cambió porque cuando le detuvieron estaba de jean y sin remera. Aparte, la Policía nos contó que el candado de la casa estaba lleno de sangre”, precisó la entrevistada.
Gravemente herido, Santa Cruz cruzó la calle y le dijo al padre de su pareja que necesitaba algo para defenderse porque el agresor lo amenazó con volver con varios amigos para “terminar” lo que empezó, como le habría dicho.
De ahí salió a pie por avenida Yerbal Viejo con la intención de llegar hasta la Seccional Quinta. Por el camino, según comentó una vecina, se sentó en el muro de una casa durante algunos segundos para recuperar el aliento, tras lo cual apenas caminó media cuadra y cayó desplomado.
Los vecinos dieron aviso a la Policía, pero al arribar los uniformados constataron que la víctima no presentaba signos vitales.
“Por acá pasó tambaleando y chorreaba sangre”, sintetizó un vecino todavía conmovido.
El médico policial en turno constató una lesión de arma blanca a la altura de la tetilla izquierda. Según pudo precisar una fuente del caso, el arma blanca llegó al corazón, lo que derivó en una hemorragia interna fatal.
En tanto, el cadáver fue derivado a la morgue judicial de Posadas para la correspondiente autopsia.
Según allegados, la víctima trabajaba en construcción y desde hacía siete meses estaba en pareja con Verónica O. También mencionaron que había sido el mejor amigo de quien ahora es el principal sospechoso de su homicidio.
“Alexis trabajó todo el día y llegó a eso de las ocho de la noche. Le dijo a mi hermana que tenía ganas de comer un guiso y que él iba a preparar, que ella no se preocupe. Estaba picando cebollas cuando llegó el otro con el bebé y empezó a los gritos. Se ve que tenía todo planificado, llevó el cuchillo y quería que salga”, indicó otro familiar de la pareja de la víctima.
Además, comentó que en las horas previas la mujer recibió un mensaje que cobró relevancia tras el hecho: “Si le hago algo a Alexis, seguro que no me vas a dejar ver más al bebé”.
Y agregó: “Él (por el sospechoso) era muy celoso por el trato que Alexis tenía con el hijo. Aparte que habían sido mejores amigos. Pero Alexis siempre le cuidó muy bien al bebé y nunca le tocó un pelo a mi hermana. El otro sí siempre fue malo, golpeador y amenazaba”.
El citado mensaje y el hecho de portar un cuchillo avalarían la hipótesis de la premeditación.
También mencionaron que el ahora detenido no trabajaba, pero sin embargo hace poco compró una moto, lo que relacionaron con hechos delictivos.
“Aparte consume drogas y se pone loco, pero ayer (por el miércoles) estaba sano. Planificó todo porque se creía impune, como el año pasado le hincó al hermano y no pasó nada”, remarcaron.
El sospechoso fue detenido el mismo miércoles, alrededor de las 21.50, en el barrio Oasis, a unos tres kilómetros del lugar donde apuñaló a la víctima.
En el lugar la Policía halló una remera con posibles manchas de sangre, mientras que ayer continuaban en busca del cuchillo utilizado para perpetrar dicho crimen.
El trágico deceso de Alexis Santa Cruz se inscribe en una lamentable seguidilla de homicidios que en las últimas semanas se sucedieron en la ciudad de Oberá.
El pasado 13 de marzo, tras once días de agonía, falleció la catequista y comerciante Gladis Beatriz Gómez (39), quien recibió un balazo en la cabeza durante un asalto de motochorros en su negocio de calle Piedrabuena.
En tanto, el 18 de marzo hallaron el cadáver del empleado municipal Juan Ángel Chemes, asesinado de un corte en el cuello cuando salía de su casa, en el barrio Londín, para dirigirse a su trabajo en el Jardín de los Pájaros.
Los tres casos, según la Policía, estarían virtualmente resueltos puesto se procedió a la detención de los correspondientes sospechosos.
Fuente: Daniel Villamea