El ministro de Seguridad, Jorge Lagna debió dejar su cargo al frente del Ministerio de Seguridad tras el recrudecimiento de la violencia en Rosario.
En las últimas semanas, la ciudad registró un promedio de más de un asesinato cada 24 horas y los números amenazan con superar los récord de 2013 y 2014 cuando la guerra narco estaba en su momento más violentos
Además de los asesinatos de integrantes de bandas narco que luchan por el control del territorio, se registraron hechos que conmovieron a la población como la balacera que mató a la mamá de Virginia Ferreyra y la joven profesora de danzas, peleando por su vida en el hospital. Lo mismo sucedió con Lucas Vega de 13 años que recibió un disparo por quedar en el medio de una riña.
La situación terminó de explotar este martes cuando la ciudad de Rosario amaneció con varios de sus principales edificios públicos pintados con el mensaje «Plomo y humo, el negocio de matar». Además de la vandalización, el hecho dejó en evidencia la absoluta impunidad con que se manejaron por toda la ciudad los autores de las pintadas.
Según anunciaron desde gobernación, quien asumirá al frente del Ministerio será el ex comisario Rubén Rimoldi, un policía de la vieja guardia que se enfrento en el 2008 al socialista Hermes Binner por estar en desacuerdo con los nombramientos que había decidido el entonces gobernador.
En ese momento, el ministro de Seguridad de Binner Daniel Cuenca decidió cortar con la tradición de ascensos automáticos por rango y antigüedad y eso detonó el enojo de Rimoldi quien renunció a la Regional del Departamento Caseros.
Lo cierto es que Rimoldi es de la vieja guardia de la Policía de Santa Fe.
Ingresó a la fuerza en el 78 hasta llegar a ser Comisario General y dejó la policía tras la pelea con Binner. Sin embargo, la bronca con el progresismo se le paso y en las elecciones de 2015 participó de la interna del Frente Progresista