Posadas: Inseguridad y abandono en una escuela, robos, oscuridad y docentes que pagan la seguridad

7 mayo, 2025

Directivos de distintas instituciones educativas alertan sobre robos reiterados, falta de infraestructura y condiciones precarias que impiden dar clases con normalidad. Cuestionan el discurso oficial sobre “escuelas innovadoras”.

Mientras el discurso oficial pone el foco en escuelas “disruptivas” e “innovadoras”, la realidad que atraviesan varias instituciones educativas de Posadas dista mucho de ese ideal. Directivos de distintos niveles educativos denunciaron robos constantes, falta de iluminación, inseguridad y carencias estructurales que afectan el dictado normal de clases.

Desde el BOP 17, ubicado en el Barrio Manantial, la directora Betty Castelli relató que los robos son tan frecuentes que ya se volvió costumbre comenzar cada semana reparando lo que fue saqueado. “A principio de año no podíamos comenzar porque nos robaron los cables, ventiladores, rompieron puertas y vidrios. Llevaron todo lo que pudieron”, explicó. Según detalló, los fondos para reponer lo robado salen de actividades como rifas y ventas de locro: “Todo va a parar a la seguridad. Ahora tenemos cámaras que compramos con ese dinero, y también pagamos seguridad privada”.

Los docentes del BOP 17 también aportan de su bolsillo. “Es un trabajo cooperativo. Pero no adelantamos nunca. Roban, compramos, nos vuelven a robar y vamos para atrás”, agregó Castelli. Hace dos semanas, el colegio se quedó sin iluminación en la parte trasera. “Atrás tenemos una villa. Los fines de semana largos son tremendos. Necesitamos custodia en esas fechas y durante la noche”.

En la Escuela Nocturna para Adultos EMPJA, que funciona en el mismo lugar, su directora Virginia Sanz, detalló que la inseguridad complica seriamente el dictado de clases por la noche: “En la zona del fondo no hay luz, y nos da miedo ir. A la mañana tampoco se ve nada, y a la tarde no se puede dar clases en ciertos cursos”.

Sanz recordó que desde 2020, en plena pandemia, la institución sufrió al menos siete robos. “Entraron por los techos, se llevaron computadoras, impresoras y materiales. Tuvieron tiempo para elegir qué robar”, afirmó. Todo fue repuesto con el esfuerzo del personal docente.

Consultada sobre la supuesta transformación educativa impulsada desde el gobierno provincial, Sanz fue tajante: “Estamos en Posadas y esa realidad la vemos de lejos. Eso no va, no funciona. No tenemos luz, ni internet, ni computadoras. Seguimos con la educación clásica”.