Boca Juniors se hizo fuerte en su visita a River Plate y se quedó con la victoria en el Superclásico del fútbol argentino. El equipo de Sebastián Battaglia se impuso por 1-0 en el estadio Monumental con un gol del colombiano Sebastián Villa y se subió a lo más alto en la Zona B de la Copa de la Liga Profesional.
Un primer tiempo friccionado en el que River fue algo más claro
Fue un primer tiempo trabado, en el que primó la fricción por sobre el juego fluido. Aún en ese embrollo que por momentos se generó en el mediocampo, River fue algo más claro en sus incursiones en ofensiva.
Julián Álvarez era la gran referencia del conjunto local. Con su potencia y sus apiladas fue el más peligroso del Millonario y merodeó el gol en dos ocasiones. A los 29′, cuando superó la marca de Juan Ramírez y de Marcos Rojo para luego definir a las manos de Rossi y, a los 42′, cuando encaró hacia el arco y forzó una dura infracción de parte de Ramírez detrás de la medialuna. En el tiro libre, elevó su disparo.
Boca encontró el gol en el segundo tiempo
En el segundo tiempo cambió la tónica del partido. Los cambios le dieron más aire al desarrollo de las acciones. Y, sobre todo, el ingreso de Luis Vázquez, le permitió al Xeneize ser más agresivo.
El joven delantero estuvo cerca de marcar el 1-0 cuando, a los tres minutos, se escapó por la derecha y sacó un remate que Franco Armani desvió. En la respuesta, River hilvanó una buena jugada y Enzo Fernández pinchó la pelota para el ingreso a la carrera de Milton Casco, que no pudo conectar.
Sobre los 8 minutos del complemento, Sebastián Villa aprovechó un error en el fondo de Leandro González Pirez y decretó el 1-0 para los dirigidos por Sebastián Battaglia.
El nerviosismo se adueñó de River después del gol. Ni los cambios lograron enderezar el rumbo. Entraron Braian Romero y Juan Fernando Quintero, entre otros, pero aún así el equipo no ganó en claridad.
Un mano a mano que Rossi le ganó a Julián Álvarez, un tiro libre de Juanfer Quintero que volvió a encontrar bien parado al arquero de Boca, un remate de lejos de Enzo Fernández que rozó el travesaño y salió. El Millonario logró generar situaciones, pero no supo aprovecharlas.