Obera: Denunciaron brutal agresión a futbolista de 15 años en partido

25 mayo, 2022

Según la denuncia, la menor fue atacada y lesionada por mujeres mayores. “No voy a seguir arriesgando la vida de mi hija en una competencia poco seria”, remarcó la madre

Un fallo arbitral seguido por un reclamo, como sucede tantas veces en cualquier partido de fútbol. Pero luego un tumulto, empujones y en cuestión de segundos los insultos se convirtieron en golpes de puño y patadas contra una menor de 15 años que resultó brutalmente agredida por cinco adversarias, todas mayores. 

El hecho se registró el pasado 7 de mayo durante un partido entre los equipos femeninos de Olimpia y Racing de Villa Svea, válido por el campeonato de reserva de la Liga Regional Oberá de Fútbol (LROF).

Según la denuncia radicada ante la Seccional Segunda por Viviana M. (37), madre de la víctima, el partido en cuestión se disputó en el estadio del Club Atlético Oberá, ya que el organigrama de la competencia contempla la disputa de toda la fecha en un mismo estadio.

“Yo estaba en la cancha y vi todo. El árbitro cobró un penal para Racing, mi hija le preguntó por qué y en eso una jugadora de Racing llegó corriendo y la golpeó. La empujó y le dio una trompada en la cara. También otras cuatro jugadoras de Racing golpearon a mi hija, que tiene 15 años, mientras que las otras son todas mayores”, subrayó la progenitora.

Siempre según la misma testigo, quien inició la gresca fue identificada como Milagros C. También participaron Rocío C., Yaquelín A., Mari R. y Norma T. “Todas le propinaron golpes de puño y patadas a mi hija”, se cita en la denuncia.

La madre de la menor dejó asentado que el entrenador de Racing “no intervino ni hizo nada para evitar la golpiza. Tampoco actuaron los árbitros. Las compañeras de mi hija tuvieron que meterse para evitar que le sigan pegando y así la entrenadora la pudo sacar de la cancha”.

“Patadas a la cabeza”

En diálogo con El Territorio, la madre lamentó el incidente en el cual su hija terminó con golpes y excoriaciones en diferentes partes del cuerpo, tal como consta en el correspondiente certificado expedido por el médico policial en turno.

Además, cuestionó la falta de contención por parte de la Liga Obereña, ya que luego del incidente la menor no tuvo ningún tipo de respaldo institucional.

“Mi hija juega al fútbol porque le apasiona, hace un sacrificio para entrenar y representar de la mejor manera a su club. Todavía es chica y está aprendiendo. El deporte también son valores, pero lamentablemente no todos piensan así. La forma en que le pegaron fue brutal. Incluso estaba caída y le tiraban patadas a la cabeza, una locura. Fue criminal”, remarcó.

En tanto, aseguró que todas las jugadoras de Racing que golpearon a la chica son mayores, lo que la motivó a radicar la denuncia.

“No entiendo, no me entra en la cabeza cómo mujeres grandes, algunas con hijos, pueden actuar de esa forma. No sé qué valores pretenden inculcar a las chicas más jóvenes de su club actuando así. Para colmo el entrenador ningún cargo, y tampoco fue la primera vez que actuaron con violencia en una cancha”, remarcó.

Asimismo, cuestionó la pasividad de la Liga Obereña que redujo el incidente a la intervención del comité de disciplina que impuso una pena máxima de cinco partidos de suspensión a algunas de las futbolistas implicadas.

En tal sentido, la progenitora opinó que “así van a seguir pegándose porque total les suspenden pocas fechas y listo. La verdad es una lástima, pero no voy a seguir arriesgando la vida de mi hija en una competencia tan poco seria”.

Grave antecedente

En junio del año pasado este diario publicó detalles de una violenta agresión de una jugadora de Racing de Villa Svea a una propia compañera de equipo, hecho del que participaron dos hombres, uno de los cuales gravó el episodio.

“De acá nadie sale, nadie”, se escucha en el video de la brutal agresión. El hecho se registró en el Club Panorámica de Oberá.

El ataque quedó plasmado en por lo menos dos videos que ese mismo día comenzaron a circular por grupos de WhatsApp. A consecuencia de ello, la Unidad Regional II de Policía inició una investigación de oficio que permitió identificar a la víctima y a los agresores.

Asimismo, desde el Club Panorámica confirmaron que la agresora fue suspendida por un año de toda actividad organizada por la entidad. Tampoco podrá ingresar al predio por dicho lapso.

El hecho se produjo en el baño de mujeres e intervinieron el hermano y la pareja de la agresora. El primero grabó el ataque y el segundo impidió que otras dos mujeres que se hallaban en el lugar puedan auxiliar a la víctima o pedir auxilio, como quedó plasmado en los videos.

Las imágenes fueron brutales por la violencia desatada y la impunidad que desplegaron la agresora y sus cómplices, quienes encerraron en un baño a la víctima, la sometieron a una paliza, grabaron un video y lo difundieron por las redes sociales.

“Esto es lo que hace una cerveza”, se escucha decir al que filmó, tras lo cual lanzó una frase intimidante: “De acá nadie sale, nadie”. 

Fuente: Daniel Villamea