La familia de un comerciante de Garupá y varios puntos de Posadas fue víctima ayer de una banda de “robacasas”, que huyeron con un botín no estimado en su totalidad pero que superaría los cuatro millones de pesos.
El dato que sorprendió en torno al hecho fue que todas las sospechas apuntan a las andanzas del “Negro o Negrito”, un hombre de 43 años con un amplio historial delictivo, desde fines de los ’90, y que parece tener “demasiada suerte para no caer” o los vínculos necesarios para sentirse “intocable”.
Una camioneta Ford Ecosport blanca fue la señalada por los investigadores de la Unidad Regional X y de la Dirección Investigaciones Complejas. Y nada menos la que correspondería al mencionado mentor o cabecillas de múltiples delitos contra la propiedad cometidos durante los últimos meses.
La Zona Sur de Posadas y todo Garupá sería su territorio, de acuerdo a las fuentes consultadas por PRIMERA EDICIÓN. Pero al “Negro” se lo apunta también por el intento de asalto que terminó con un presunto delincuente abatido en una fábrica de placas de madera en Dos de Mayo, durante la madrugada del martes de la semana pasada.
En cuanto al robo de ayer, el comerciante de 38 años denunció que forzaron una reja y rompieron una ventana de su casa en el cruce de las calles Brasil y Lagardo y “revolvieron” el inmueble hasta hallar una caja de seguridad en una mesa de luz del dormitorio matrimonial que contenía cuatro millones de pesos, entre billetes de esta moneda pero también dólares y reales, pero también joyas por un valor que no se pudo determinar pero que superaría este monto.
La denuncia fue realizada pasadas las 2 y según las primeras averiguaciones, la camioneta blanca merodeó la vivienda minutos antes y los delincuentes aprovecharon un corte de luz y descendieron para ingresar y escapar con el botín.
Primera pista.Los registros de cámaras de seguridad de viviendas próximas al cruce de las calles Lagardo y Brasil y de un local bailable de la colectora Tita Merello y calle Lagardo fueron analizados y coinciden en el paso de una camioneta blanca, Ford Escosport .
También actuaron seguros de que el propietario ni su familia se encontraba en el lugar. Cuando este regresó y notó el vidrio roto de una ventana, temió por sus ahorros y pocos segundos después confirmó que lo habían robado.
De los análisis de cámaras de seguridad de la zona se avanzó en la sospecha dirigida al “Negro” y al menos a tres o cuatro personas más que se encargaron de ingresar a la vivienda en el barrio Villalonga.
La investigación está bajo la decisión del juez de Instrucción 3, Fernando Luis Verón, de turno en marzo y se barajaban anoche allanamientos para intentar esclarecer el delito y recuperar lo robado.
También se aguardan resultados de las pericias de las actuaciones de la Policía Científica y de la Dirección Cibercrimen.