Alberto Fernández ya aceptó cambiar el gabinete y negocia con Cristina Kirchner y Sergio Massa para sumar al titular de Diputados al Gobierno.
En el Gobierno reconocen que hay ministerios que no funcionan y que no hay cohesión de equipo entre los 20 ministros. Una alta fuente del Ejecutivo admitió a LPO que algunos ministros pueden tener virtudes de manera individual pero no como ministros, por lo que deberían ser reemplazados.
El presidente retomó el diálogo con Cristina, con quien habló durante 4 horas el sábado y ya les confirmó a sus colaboradores que cambiará el gabinete. El centro de la escena lo sigue teniendo Massa, que podría recalar en la jefatura de gabinete en lugar de Juan Manzur. También se habla de más cambios.
El titular de la Cámara de Diputados pide el Banco Central y Alberto no quiere ceder en ese punto. En el gabinete creen que el tigrense es un negociador nato que no romperá las conversaciones si no le conceden ese punto.
En el gobierno aseguran que los cambios no se harán con Silvina Batakis en Estados Unidos. La ministra estará de regreso en Argentina el miércoles por la mañana.
Si bien el presidente admitió que realizará cambios, su prioridad ahora es controlar la corrida del dólar, un tema con el que coincide con Cristina porque si la crisis se agrava ya será tarde para cualquier reformulación del gabinete.
Como explicó LPO, los más pesimistas hablan de ocho días sin que el propio mercado precipite una devaluación. Algunos un poco más optimistas, como Santiago Cafiero, creen que se podría aguantar dos semanas.
Luego de los cambios, el objetivo de la coalición estará puesto en intentar reconstruir cada semana la autoridad presidencial con alguna medida.