Fin del misterio: Patricia Bullrich se inclinó por Néstor Grindetti como su candidato a gobernador en la provincia

19 mayo, 2023

La aspirante presidencial apostó por el intendente de Lanús en la provincia, quien competirá con Diego Santilli; previamente se reunió con De la Torre, Iguacel y Ritondo para transmitirles la novedad

El acuerdo electoral que firmaron el lunes los altos mandos de Pro en Recoleta aceleró las definiciones en el tablero opositorPatricia Bullrich, una de las presidenciables de Juntos por el Cambio, despejó hoy la mayor incógnita en torno a su armado nacional con vistas a los próximos comicios: anunció que su candidato a la gobernación en la provincia de Buenos Aires será Néstor Grindetti, intendente de Lanús en uso de licencia y actual titular del Club Atlético Independiente.

Así, Grindetti enfrentará a Diego Santilli, el postulante impulsado por el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, uno de los competidores de Bullrich en la interna nacional de JxC, en las primarias bonaerenses del 13 de agosto.

“Como intendente de Lanús, Néstor vio de cerca la destrucción y la pobreza que generaron dos décadas de populismo y corrupción kirchnerista en el conurbano. Con decisión y gestión, luchó contra el narcotráfico, puso orden y mejoró la vida de muchos bonaerenses. No tengo dudas de que será un gran gobernador que cambiará la provincia”, expresó Bullrich a través de un comunicado.

Tras la cumbre del lunes en la casa de Vidal, Bullrich y Larreta descartaron la idea de unificar la candidatura a gobernador, sobre todo, por la resistencia del alcalde porteño a compartir la boleta de Santilli, a quien considera su principal capital político para la interna de JxC. Por ende, Bullrich avanzó con el ordenamiento de su estructura en el distrito que concentra a más del 40% del padrón electoral. Sus laderos en la provincia le advirtieron que debía terminar con la incertidumbre para arrancar la campaña y unificar fuerzas en la disputa con Santilli, quien se mantiene en la cima de las preferencias en los sondeos.

Hasta hoy, Bullrich había recorrido el territorio bonaerense con tres precandidatos a gobernador: Grindetti, el senador provincial Joaquín de la Torre y el intendente de Capitán Sarmiento, Javier Iguacel. Hace dos semanas, se garantizó el apoyo de Cristian Ritondo, el heredero de María Eugenia Vidal en Buenos Aires. Todos ellos aspiraban a quedarse con el respaldo de la exministra en la pelea por la sucesión de Axel Kicillof.

Bullrich se inclinó por un dirigente con extensa trayectoria en Pro, cercano a Mauricio Macri y con despliegue territorial en la tercera sección electoral. Exministro de Hacienda de Macri en la administración porteña y extitular del Banco Ciudad, Grindetti gobierna en Lanús desde 2015. Y fue jefe de campaña de Santilli en las legislativas de 2021. Tras esa contienda, se alejó del larretismo por diferencias con el estilo de conducción del jefe porteño -el vínculo con Santilli quedó quebrado- y estrechó lazos con Macri, su mentor en política. Antes de cerrar filas con Bullrich, dijo que el fundador de Pro “merecía un segundo tiempo”.

Así como Larreta intentó mostrar un gesto de autonomía cuando dispuso la doble votación en la ciudad, Bullrich quiso dejar en claro que tuvo la potestad de la decisión respecto a su candidato a gobernador. En otras palabras: Grindetti no fue una imposición de Macri. A la exministra le molesta que sobrevuele en el “círculo rojo” la idea de que Macri actúa como su jefe de campaña o que le armará el Gabinete, pese a que nutrió sus equipos con colaboradores de su confianza.

En el campamento de la exministra remarcan que priorizó elegir un perfil compatible con el suyo para la batalla bonaerense. Entiende que Grindetti cuenta con experiencia en la gestión provincial y le garantizaría “gobernabilidad” en la provincia en un eventual mandato presidencial. A su vez, valora que haya resistido en el conurbano, bastión de Cristina Kirchner, el tsunami de votos que sufrió Macri en los comicios de 2019. Ese año Grindetti, que incorporó peronistas a su armado, logró la reelección en Lanús.

Bullrich, además, pretende tender puentes con el sector de la UCR bonaerense que responde a Maximiliano Abad, jefe del partido centenario en Buenos Aires, quien controla la mayoría de los intendentes radicales. Abad no integra el armado de Gerardo Morales y Martín Lousteau, socios estratégicos de Larreta. Con ese mapa en la cabeza, Morales presionó a Larreta para que no comparta la boleta de Santilli con Bullrich, una idea que fomentó Macri ante la posibilidad de que Kicillof desdoble las elecciones generales en la provincia. El larretismo también mantiene una alianza con la Coalición Cívica, de Elisa Carrió, y busca sellar un acuerdo con Miguel Ángel Pichetto (Encuentro Republicano Federal) en la provincia.

Tras el anuncio, Grindetti cuestionó la gestión de Kicillof -habló de “mala praxis”- y aseguró que desea tener a un radical como compañero de fórmula. “Con Iguacel, Ritondo y De la Torre vamos a seguir trabajando juntos”, señaló en diálogo con Radio Con Vos.